La voz de la Siempreviva
Roque Dalton, ya sea como poeta, novelista, ensayista o periodista, es sin duda símbolo de la literatura salvadoreña. Pero una literatura distinta a la tradicional, que es subversiva, es sufrida y es tan salvadoreña como las penurias de los salvadoreños.
Seguramente algunos lectores neófitos encontrarán la literatura de Roque Dalton como extraña, incomprensible y podrían decir «Este poema no suena bonito», sin embargo, al estudiar la obra completa de Dalton nos daríamos cuenta de su habilidad para jugar con el lenguaje y sobre todo el contenido e ideas de su creación literaria.
Dalton, quien fuera silenciado físicamente, también ha tratado de ser silenciado literariamente por años, pero su voz ha logrado permanecer y resonar entre los lectores salvadoreños. Pero, ¿Qué podría esperarse de un sistema educativo que ha dejado una única unidad para la literatura salvadoreña hasta el final del segundo año de Educación Media?
Con una literatura que nunca descuidó el contenido y que calca a la perfección nuestro lenguaje y nuestro descontento por la realidad desigual, hace de Roque Dalton un escritor digno de ser recordado y leído. Para él los grandes temas fueron lo político, lo social, lo ideológico y las emociones ante estos tópicos.
Sí la literatura es un medio para conocer la historia, Dalton es obviamente un canal al pasado desde las trincheras de lucha contra el sistema desigual. En su poesía encontramos la cárcel, el amor, la desigualdad, la pobreza, la violencia, la injerencia internacional, la muerte, la matanza, la dictadura, en fin… lo salvadoreño.
La belleza de su poesía es que es tan cercana a nosotros, tan vivida, tan nuestra. Con una ornamentación literaria alejada de una hipócrita suntuosidad, prefirió decir «los guanacos hijos de la gran puta» o que uno de sus poemas se titulara «Hijo de puta» y que decir de llamar a Masferrer «viejuemierda». Pero, no es acaso el lenguaje y su poder la esencia de la literatura. Roque Daltón supo usar el el lenguaje y convertirlo en su mejor arma.
Ahora bien, como todo escritor y poeta dejo ver también su lado poético solemne en poemas como «Alta hora de la noche» y «Cuestión de Corazón» donde juega con la sonoridad, las repeticiones y símbolos.
De manera poderosa Dalton tomó nuestra historia, nuestra cultura, nuestra vida y la convirtió en lenguaje poético. Porque su literatura plasma nuestra historia y cultura desde su visión revolucionaria y salvadoreña.
Además, el estilo de Roque nos deja verlo con claridad, pues al contrario de otros escritores él no se esconde, se muestra tal cual es en su literatura. En ese sentido, en sus escritos podemos ver sus múltiples facetas, lo vemos como hombre enamorado, revolucionario, intelectual, poeta, narrador y nos hace ver la sociedad de su tiempo que no se aleja de la nuestra.
De esa manera, encontrar semejante equilibrio en un solo autor deja entrever la grandeza de Roque Dalton como escritor y como un excelente patrón literario para las nuevas generaciones de escritores frente a nuestra realidad tan desigual, con pobreza, exclusión social, violencia y corrupción política como la de Dalton.