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Día de los muertos en El Salvador

Día de los muertos en El Salvador

Cada 2 de noviembre El Salvador se une a la tradicional conmemoración para los difuntos. Muchas de las familias vistan los cementerios para homenajear a los seres queridos que han fallecido. Los camposantos se visten de colores, festones, confeti y se engalanan de flores. Esta tradición es parte de La Conmemoración de Todos los Fieles Difuntos, feriado religioso llevado a cabo todos los años con el objetivo de elevar plegarias por aquellos que han dejado su vida terrenal y han trascendido a un plano espiritual o celestial.

Sin embargo, la tradición de corte religioso ha permeado tanto hasta llegar a lo popular, de allí que en nuestro país se acostumbre visitar los cementerios con coronas florales, cruces de flores naturales y artificiales con o sin intención religiosa. Los alrededores de los cementerios se llenan de comerciantes de flores, adornos, cruces, y coronas de flores naturales o artificiales; también se encuentran los negocios de comida típica y golosinas. Convirtiendo este día en una fecha relevante para el comercio local en los municipios y pueblos de El Salvador.

Esta fecha permite que se forme un pintoresco collage lleno de flores, pintura, brochas y pinceles, azadones, palas y piochas para engalanar las tumbas de los seres queridos. En los camposantos convergen la nostalgia, la religión, los valores familiares, las expresiones culturales y el comercio, convirtiendo este feriado en una expresión cultural de gran relevancia.

Los cementerios, pierden su aura de soledad, tristeza, muerte y llanto, y se vuelven coloridos, festivos, solemnes y de respeto por los que nos han dejado. El silencio es opacado por el movimiento de las familias, los tumberos y comerciantes. Hay comida, bebida y en algunos casos hasta música para la familia, los amigos y por su puesto para los fallecidos.

– Pintura, le arreglo la tumba- se escucha decir a los jóvenes tumberos que se mueven entre la muchedumbre, cargando sus cubetas y herramientas para pintar o darle forma a la tumbas. Algunos de los que llegan a enflorar contratan los servicios de estos y otros llevan su propia pintura y brochas.

Familias enteras se reúnen al rededor de las tumbas y conversan sobre las vivencias con los ya fallecidos. Otros reflejan la tristeza por la ausencia de los que han partido. De una u otra forma, los salvadoreños le rinde homenaje a quienes en vida formaron parte fundamental de los visitantes de los camposantos. El día de los muertos se convierte en un día para honrar la vida de quienes se van físicamente pero no de nuestra memoria.

A continuación una galería de fotos del tradicional Día de Los Muertos en El Salvador.

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Javier Iraheta